martes, 17 de octubre de 2017

CREMAS: ¿SON MEJORES LAS MÁS CARAS?

Linea Zo una de las marcas que nos gustan

¿Por qué unas cremas cuestan tan poco y otras tanto? ¿son mejores las más caras?. Las respuesta a esto último sería no siempre. Se han divulgado por las redes sociales diversos estudios efectuados con cremas, por organizaciones como la de consumidores -OCU- y otras, en las que han establecido un ranking de las mejores crema hidratantes, antiarrugas, etc, etc. El problema de la mayoría de estos estudios comparativos es que no están realizados con una metodología científica rigurosa por lo que extraer conclusiones es simplemente imposible; y esto, sin considerar los posibles intereses comerciales que pueden estar detrás de algunos de estos trabajos. Es cierto que todas las cremas , en mayor o menor medida, nos van a hidratar la piel y evitar la pérdida de agua de la misma, pero realmente cuando nos ponemos una crema estamos buscando más cosas……; y aquí el universo se amplía a conceptos tan generales y -a veces tan utópicos- como “mejorar nuestra textura de  la piel”, “cerrar poros”, “disimular marcas”, “eliminar manchas”, “quitar arrugas”, “dar luminosidad” y, por supuesto “rejuvenecer”……  Para este “paraíso prometido”, los anuncios de prensa y televisión, no vacilan en presentar a bellas chicas, menos veces chicos, que se aplican una fabulosa crema que le quita las arrugas en pocos días….. y que repiten frases como “avalado por dermatólogos” ó “testado dermatológicamente”. Por supuesto, ni el/la chic@ tiene arrugas, ni necesita ninguna crema…., y sólo con que limpiara su piel diariamente tendría suficiente. Pero el universo mágico de nuestro subconsciente funciona así y la marca obtiene ventas millonarias.
Una crema puede contener entre 10 a 25 principios, muchos de ellos necesarios para que la crema penetre en la piel, hidrate, se mantenga útil una vez abierta, proporcione un tacto y olor agradable etc. Sin embargo, si queremos hacer algo más tenemos que recurrir a los verdaderos principios activos, o sea, a lo que pueda ser más útil a nuestra piel para alcanzar nuestro paraíso individual prometido. Para ello, las marcas comerciales publicitan que sus cremas llevan múltiples sustancias como hidroxiácidos, colágeno, hialurónico, coenzima Q10, retinoico, argirelina, aceite de aguacate, vitamina E, etc, etc, con capacidad para hacer maravillas sobre nuestra piel. El problema es que la mayoría de las veces, estas sustancias tienen pocos estudios científicos rigurosos detrás de ellos, cuando no, han sido realizados en laboratorio pero no testados en la piel humana; en fin, la dichosa metodología científica… Es cierto, que muchos laboratorios dermatológicos invierten mucho en la obtención de nuevas sustancias y en la comprobación de la efectividad de las mismas y eso lógicamente hay que pagarlo…. Por el contrario, muchas cremas de laboratorios de cosmética invierten mucho pero……en publicidad y eso……. también hay que pagarlo.  Por tanto, el problema es que cuando compramos una crema estamos pagando muchas cosas: sus principios activos, las patentes de investigación, el embalaje, la publicidad, la marca en sí, etc; y por ello, la elección adecuada es complicada. ¿Cuál sería mi recomendación como dermatólogo?. Pues serían estas:

  1. Si tu piel tiene problemas (acné, exceso de grasa, manchas, daño solar, etc), no dudes, no des vueltas preguntando: vete directamente al dermatólogo, él te dirá los cosméticos aconsejables para tu piel.
  2. Si no tienes problemas, rígete por el principio menos es más: Usa los menos productos pero que te proporcionen lo más –lo mejor- para tu piel.
  3. La piel es conveniente limpiarla diariamente 1-2 veces al día con jabones o limpiadoras suaves.
  4. Un fotoprotector adecuado a nuestro tipo de piel es aconsejable por las mañanas desde marzo a octubre (mínimo) y en la mayor parte de España. Recuerda que el fotoprotector es la crema nº 1 antienvejecimiento. 
  5. Ponte por la noche, a partir de los 35 años, alguna crema con algún principio activo demostrado científicamente como retinoico ó hidroxiácidos.
  6. No recurra a cremas muy caras en las que pagues el concepto “marca”, “publicidad” o “exclusividad”; este dinero te lo ahorras, lo metes en una hucha y periódicamente te haces tratamientos efectivos como son la luz pulsada, peeling, mesoterapia, botox, etc….que son los que realmente ayudan a mantener tu piel, a solucionar problemas y a rejuvenecerla. Independientemente de que cada persona tiene su genética, las actrices, modelos, etc, invierten muchísimo en estos tratamientos…… y también en photoshop.
  7. Lleva una vida sana sin tabaco, poco alcohol, peso aceptable, haz ejercicio, practica sexo, sé optimista, aumenta tu autoestima, quiérete a ti mism@ y, sobre todo, ten equilibrio psicológico, tan difícil en estos tiempos.